El claustro
La disposición del claustro de la Sagrada Familia es totalmente original y única. No integra el atrio, no está situado a un lado de la iglesia. En la Sagrada Familia circunda el templo, lo cierra dentro de un rectángulo, es como un foso que separa el espacio sagrado del espacio profano. El centro del cosmos del claustro de la Sagrada Familia es el templo.
Tiene también la función de elemento de comunicación o distribuidor entre las diversas dependencias y es un espacio idóneo para la circulación de procesiones. El hecho de que sea la encrucijada de las cuatro direcciones favorece esta función.
Gaudí había dicho: <<El claustro estará hecho para rezar el Rosario en procesión y para aislar el templo de los ruidos de la calle>>. El el pináculo del primer frontón encontramos el anagrama simbólico de la Sagrada Familia: una cruz, una sierra y una M.
PENSANDO UN POCO MÁS...
¿Es mi amor de calidad?
“A veces la gente adora a “otros dioses” sin darse cuenta. Los falsos “dioses”, cualquiera que sea el nombre, la imagen o la forma que se les dé, están casi siempre asociados a la adoración de tres cosas: los bienes materiales, el amor posesivo y el poder. […] ¡Qué fácil es transformar el amor en una falsa divinidad! La gente piensa con frecuencia que está amando cuando en realidad tiende a poseer al otro o a manipularlo. A veces trata a los demás como objetos para obtener su propia satisfacción más que como personas dignas de amor y de aprecio”
Benedicto XVI. Discurso a los jóvenes de una comunidad de recuperación. Sydney, 18-7-2008
“A veces la gente adora a “otros dioses” sin darse cuenta. Los falsos “dioses”, cualquiera que sea el nombre, la imagen o la forma que se les dé, están casi siempre asociados a la adoración de tres cosas: los bienes materiales, el amor posesivo y el poder. […] ¡Qué fácil es transformar el amor en una falsa divinidad! La gente piensa con frecuencia que está amando cuando en realidad tiende a poseer al otro o a manipularlo. A veces trata a los demás como objetos para obtener su propia satisfacción más que como personas dignas de amor y de aprecio”
Benedicto XVI. Discurso a los jóvenes de una comunidad de recuperación. Sydney, 18-7-2008
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